miércoles, 11 de marzo de 2015

Un devenir incesante

Como dijo Haizea una vez, en el parque de atracciones, la vida es un devenir incesante...

Todo sigue su paso. Yo escribo poco. Hago greguerías, escribo historias, pero no las publico, o las publico en otros sitios. Escribo mucho por trabajo, pero escribo poco para dejar fluir lo que pienso, y pienso ahora que debería hacerlo más. En fin, escribo poco para mí.

Todo sigue más o menos igual. Mi padre está estable; bueno, un poco mejor, pero con altibajos.

Ahora soy "freelance" y hago tres o cuatro trabajos: clases, revista y materiales didácticos.
Y como, en mayor medida, es teletrabajo, voy y vengo a Vandalia y paso temporadas allí, con mis padres.

Pasan cosas que no entiendo.

Parece que muchos amigos viven fuera o están lejos. Echamos de menos a los amigos y parece que nos falta algo. Madrid no es perfecto así. ¿Quizá es el momento de irnos temporalmente nosotras también? Pensando en eso, planeamos una estancia larga en Lisboa. ¡Qué bonito será!

Llegará la primavera y estrenaremos la mochila de picnic, haremos excursiones, vendrá La Pena, celebraremos los cumples, haré torrijas en Semana Santa y jugaremos al Carcassonne.

Mientras tanto, ya programamos el viaje a Brasil y Argentina... ¡Qué bonito será!

No hay comentarios: